Sabado a lo que salga

    Hay días que tenemos todo planificado. Tenemos claro los horarios para organizar el día, lugares que visitaremos y cosas que vamos a hacer. Este sabado era todo lo contrario a esto. Simplemente era adaptarse a las circunstancias y hacer lo que nos apeteciera. El día estaba claro que sería muy caluroso. La ola de calor que anunciaban para el fin de semana ya estaba haciendo efectos. Despues de salir del curro. Bajo en mi coche al Puertito con la mochila, la bici y Chocolate. Previamente Lu2 ya me habia avisado de que la bici era mejor dejarla para la tarde. Lo cual agradecí enormemente ya que con ese calor hubiera sido una machacada. Al llegar allí y buscar al equipo pokemon. Decido que subo a Chocolate a casa porque hace demasiado calor y bajo con la mochila ya preparada para quedarme por la noche en casa de Lu1. Despues de unas horas de playa, una comida en el Mcdonald y una sesión de olimpiadas. Llega el momento de coger la flaca.

    Hemos quedado en la estación de San Benito y voy en la bici ya que esta bastante cerca. Al montarme noto que algo no va bien. Me bajo en la estación y veo que llevo la rueda trasera desinflada. Vaya faena...intento inflarla pero no hay duda esta picada. Saco la rueda trasera y justo aparece Lu2 menos mal. Me ayuda a quitar la camara, la cambiamos por la otra, le damos aire y ella vuelve a poner la rueda trasera. Creo que de esta vez si pincho y estoy sólo podre cambiarla. Viendo el calor que hace decidimos tirar hacia Anaga. El principio es bastante desastroso ya que nos metemos por varias calles en sentido contrario...pero al final llegamos a la carretera que queríamos coger. Paramos en la gasolinera cerca de Outdoor para darle aire a mi rueda trasera y seguimos subiendo a la Cruz del Carmen. Anaga es un paisaje maravilloso y en bicicleta se disfruta mucho más. Te llega el aire y sientes la naturaleza en mayor medida (bueno como dice Lu2 en un descapotable sería mucho mejor porque además podrias ir tomando una cerveza jiji). Pasada la Cruz del Carmen seguimos hacia el Pico del Ingles. Despues de ver gallinas en medio de la carretera, una parada de guaguas donde se jugaba una partida de futbolín (esta gente si que sabe divertirse esperando la guagua) y algún guiri en coche que nos da algún susto, llegamos al Bailadero momento en que Lu2 dice que es buen momento para girar. Entre el tiempo que perdimos por mi pinchazo y lo rápido que se me pasaba todo porque iba disfrutando del paisaje, no me había percatado que estabamos justitos de luz. La vuelta fue también para disfrutar. Pese a la ola de calor allí el aire era diferente y no pasamos ese calor que podríamos haber tenido en cualquier otro lugar.  Este entreno era lo que necesitaba mi mente. Porque las soluciones para nuestros problemas estan en nuestro interior y para encontrarlas necesitamos tranquilidad, desconexión y paz. La naturaleza y la bicicleta me han ayudado en esta ocasión. Pero a la vez somos seres sociales y necesitamos compañia y la presencia de Lu2 en este entreno fue la que me dio este equilibrio. Tenía mis ratos para pensar y disfrutar del momento en silencio y mis ratos para charlar y reirme. Sentirme valorado por mi mismo. Viva la bicicleta! Al final completamos 42,10 kms de belleza natural en 2h07m49s a un ritmo de 19,8 km/h. 
   Hoy estoy perdiendo un poco de las dos cosas. Naturaleza porque unos asesinos siguen quemando nuestros montes y compañia porque ha fallecido un amigo de la infancia, después de una larga lucha entre la vida y la muerte. Estos si son problemas y cosas que me hacen sentirme impotente y pequeño.

   La noche se alargó hasta altisimas horas en casa de Lu1. Cenamos, comimos tarta pokemon y helado. Bebimos mucha cerveza y jugamos a la Wii. 

    En los jjoo la actuación española fue la siguiente: un oro, en Elliot 6 de vela; una plata, la de Saúl Craviotto en K2 200, y un bronce, el de la selección española de balonmano femenino. Destacar el record del mundo del equipo jamaicano de 4x100 que han logrado una marca de 36.84. El doblete de Mo Farah, en su "casa" siendo uno de los nombres propios de los jjoo y profeta en su tierra. Finalmente destacar a una rusa de 19 años Yelena Lashmanova que ha logrado el oro y el record del mundo en 20 km marcha, corriendo con mucha frialdad y logrando alcanzar a la campeonisima Olga Kaniskina, que habia corrido liderando la prueba desde el comienzo, a 300 metros para la meta. Muchas veces la diferencia entre lograr el éxito y quedarte a las puertas son pequeños detalles. Un segundo o un centímetro te puede alejar del triunfo.